Pippo Biondo y Santina D’Alessandro, padres del cámara italiano Mario Biondo, ofrecieron este jueves una rueda de prensa en Barcelona tras conocerse la resolución de la Audiencia Provincial de Madrid, que admite por primera vez que la muerte de su hijo “pudo no haber sido un suicidio”. Visiblemente afectados, la familia expresó su indignación por el archivo del caso y anunció nuevas acciones legales para reabrir la investigación.

La resolución judicial española se acoge a las conclusiones del Tribunal de Palermo, que en 2022 determinó que el cuerpo de Mario presentaba un hematoma craneal incompatible con una dinámica suicida, apuntando a un posible homicidio. A pesar de ello, la Audiencia madrileña desestimó el recurso de apelación por “cosa juzgada”, lo que ha llevado a los padres a presentar un incidente de nulidad por vulneración del derecho a la tutela judicial efectiva.
Durante la comparecencia, celebrada en el Col·legi de Periodistes de Catalunya, Santina declaró: “Solo queremos saber quién ha matado a nuestro hijo y por qué. Han permitido que el tiempo borre las huellas del asesino”. La familia, que lleva más de una década luchando por esclarecer los hechos, insistió en que la investigación inicial fue negligente y que se ignoraron pruebas clave desde el principio.

El equipo legal de los Biondo, encabezado por la abogada Leire López, anunció que recurrirán al Tribunal Constitucional y, si es necesario, al Tribunal Europeo de Derechos Humanos, con el objetivo de que se practiquen nuevas diligencias en España. También interpondrán una reclamación de responsabilidad patrimonial contra la Administración de Justicia, por lo que consideran una “mala praxis” en la instrucción del caso.
La muerte de Mario Biondo, ocurrida en mayo de 2013 en el domicilio que compartía con la presentadora Raquel Sánchez Silva, sigue generando controversia. Aunque la justicia española cerró el caso en 2016 como suicidio, la familia sostiene que existen contradicciones en las pruebas, en la autopsia y en las declaraciones recogidas. La rueda de prensa ha reactivado el debate público y mediático sobre uno de los casos más complejos y mediáticos de los últimos años.
