La tonadillera se ratifica en la querella por revelación de secretos médicos en los tribunales de Pozuelo.
La cantante Isabel Pantoja acudió este jueves a los juzgados de Pozuelo de Alarcón acompañada de su inseparable hermano Agustín Pantoja. La artista se presentó para participar en un acto judicial relacionado con la querella que ha interpuesto por revelación de secretos, tras la difusión en algunos medios de comunicación de datos médicos que, según su defensa, están especialmente protegidos por la ley.
Declaraciones de su abogado
A la salida de los juzgados, su letrado Eduardo Urbano explicó a los medios que se trataba de las primeras diligencias del proceso: “Hemos venido a un acto judicial en relación con una acción que Isabel Pantoja ha interpuesto por revelación de secretos, de datos médicos que están especialmente protegidos. Luego, algunos medios de comunicación se hicieron eco. Eso supera los límites del derecho a la información”.
El abogado subrayó que la artista se ha ratificado en la querella y que ahora corresponde a la justicia instruir la causa: “Es el comienzo del proceso. No hay nada más que eso, se ha ratificado en la querella que hemos presentado y veremos el resultado”.
El estado de ánimo de la cantante
Visiblemente afectada, Pantoja mostró un semblante serio durante su llegada y salida de los juzgados. Urbano reconoció que la situación le está pasando factura: “Naturalmente. Ella quiere que se haga justicia y en este acto lo ha pedido expresamente. Y es que le hace daño, le hace mal. Una cosa es informar y lo que no puede ser es revelar secretos”.
La querella contra un hospital y medios de comunicación
La defensa de la cantante solicita que se investigue si se han cometido delitos por parte de un hospital, del que habrían procedido las filtraciones, y de los medios que se hicieron eco de ellas. “Un medio tiene que saber lo que tiene entre manos y que no se pueden dar algunas informaciones”, recalcó Urbano, quien aclaró que no lleva otros asuntos relacionados con la artista, como los de carácter familiar.
El caso abre un nuevo capítulo judicial en la vida de Isabel Pantoja, que vuelve a situarse en el foco mediático. La cantante, arropada por su hermano Agustín, busca que se esclarezca la filtración de datos médicos que considera una vulneración de su intimidad y confía en que la justicia determine responsabilidades. El proceso apenas comienza, pero ya ha generado gran expectación tanto en los tribunales como en la opinión pública.
