Tatel Madrid prepara una de las propuestas más sorprendentes de estas fiestas: un Roscón de Reyes edición limitada relleno de cheesecake, creado junto al maestro pastelero John Torres, considerado uno de los grandes especialistas en roscones artesanales de la capital. La colaboración da como resultado una versión que combina la tradición más estricta con un giro contemporáneo pensado para conquistar a los amantes de la repostería.

El roscón mantiene la esencia del clásico, con una masa ligera y aromática, trabajada mediante fermentaciones lentas y técnicas tradicionales. Para su elaboración se utilizan ingredientes seleccionados, como vainilla ecológica francesa, harinas de calidad, ralladuras frescas de naranja y limón obtenidas cada día, huevos frescos y mantequilla premium. La pieza se completa con su decoración habitual de azúcar perlado y almendra tostada, que aporta textura y aroma.
La gran novedad está en su interior: el roscón incorpora la célebre tarta de queso de Tatel, una de las más reconocidas de Madrid entre críticos y cocineros. Su textura cremosa y su sabor equilibrado encajan con la masa tradicional para crear una combinación inesperada, pero armoniosa, que busca respetar el sabor de siempre y añadir un toque sorprendente.

“El público nos pedía una propuesta que uniera dos de los postres más queridos de la Navidad”, explica Juan Antonio Medina, chef ejecutivo de Tatel. “Llevamos años trabajando nuestra tarta de queso y unirla a un roscón de primer nivel nos permitía crear una experiencia realmente única”.
El Roscón Tatel–Cheesecake Edition by John Torres estará disponible solo del 1 al 6 de enero, en unidades limitadas que se venderán exclusivamente en Tatel Madrid. Los más impacientes podrán probarlo antes como postre en el Mercado Tatel, desde el 10 de diciembre.

Además, la casa ha reservado un guiño especial a la tradición: entre algunos roscones se esconderá una ficha dorada, cuyo descubridor ganará un menú degustación para dos personas con maridaje, la propuesta más completa del restaurante. Una forma de celebrar la Navidad con sabor, artesanía e innovación, sin renunciar a los clásicos que forman parte de la memoria colectiva.