El actor y director Eduardo Casanova confiesa que vive con VIH: «Lo hago con dignidad»

duardo Casanova ha revelado públicamente que vive con VIH, convirtiéndose en la primera figura mediática en España en dar este paso, un gesto que busca romper el silencio y combatir el estigma social que aún rodea al virus. El actor y director, conocido por su papel de Fidel en Aída y por películas como Pieles, […]

duardo Casanova ha revelado públicamente que vive con VIH, convirtiéndose en la primera figura mediática en España en dar este paso, un gesto que busca romper el silencio y combatir el estigma social que aún rodea al virus.

Eduardo Casanova. © GTRES

El actor y director, conocido por su papel de Fidel en Aída y por películas como Pieles, anunció en sus redes sociales que convive con el virus. “Hoy rompo este silencio tan desagradable y doloroso después de muchísimos años. Un silencio que guardamos y sufrimos muchísimas de las personas con VIH”, escribió en un mensaje cargado de emoción.

Casanova subrayó que lo hace “cuando yo quiero, cuando yo puedo, lo hago por mí, pero deseo que esto pueda ayudar a más gente. Lo hago a mi manera, a través del cine, que es mi forma de comunicarme. Pero sobre todo lo hago con dignidad”.

Un documental como vehículo de expresión

La revelación está vinculada al estreno de un documental producido por Jordi Évole y Atresmedia, rodado en otoño de 2025 y previsto para llegar a los cines en 2026. Dirigido por Màrius Sànchez y Lluís Galter, el proyecto muestra un viaje personal y catártico en el que Casanova conversa con médicos, amigos y colaboradores para explicar cómo es vivir con VIH hoy en día.

El cineasta ya había abordado el tema en su serie Silencio, pero ahora lo hace desde un plano íntimo y autobiográfico, con la intención de visibilizar la realidad de miles de personas que aún sufren rechazo y discriminación.

El estigma social

Casanova denunció que cerca del 80% de las personas con VIH no ha compartido su diagnóstico con casi nadie, debido al miedo al rechazo y la serofobia que persiste en la sociedad. Su gesto, por tanto, supone un paso histórico en España, donde pocas figuras públicas han hablado abiertamente de su condición.

“Pese al miedo y la incertidumbre, hoy me siento profundamente feliz”, concluyó en su mensaje, reivindicando la necesidad de que la dignidad sea el camino para que las personas con VIH puedan vivir sin ocultarse.

Reacciones y significado

Compañeros de profesión y activistas han aplaudido la valentía del actor, destacando que su confesión puede contribuir a normalizar la conversación sobre el VIH y a derribar prejuicios que aún persisten. La visibilidad de Casanova se convierte en un referente para quienes conviven con el virus y buscan hacerlo desde la libertad y la autenticidad.

La revelación de Eduardo Casanova no solo marca un hito personal, sino también social y cultural. Al compartir su experiencia, el actor abre un espacio de diálogo necesario sobre el VIH en España, recordando que los avances médicos permiten una vida plena y saludable, y que el verdadero desafío sigue siendo acabar con el estigma.