La cantante colombiana Shakira ha sido objeto de una demanda civil en Estados Unidos por un valor cercano a los 94 millones de euros, interpuesta por un hombre de 80 años residente en California, quien la acusa de fraude, incumplimiento de contrato y explotación de persona mayor. El caso ha sido revelado por el paparazzi Jordi Martín en el programa El Gordo y La Flaca, y ha generado una notable repercusión mediática tanto en España como en América.

Según el escrito presentado ante la Corte de Miami, el denunciante asegura haber transferido más de 132.000 euros para cubrir supuestos gastos personales de la artista, incluyendo estancias en hoteles, emergencias médicas familiares y un viaje a Cuba. Además, afirma que Shakira le habría firmado un contrato para publicar juntos un libro de memorias y realizar una gira internacional de 100 conciertos, extremo que no ha podido ser verificado.
Todo apunta a que el hombre habría sido víctima de una suplantación de identidad, ya que las pruebas aportadas incluyen capturas de pantalla, billetes de avión, correos electrónicos y documentos que no han sido reconocidos por el entorno de la artista. El abogado Carlos González, que ha revisado el caso, declaró: “Las imágenes podrían corresponder a cualquier perfil falso en redes sociales que afirme ser Shakira. No hay evidencia sólida que vincule a la cantante con estos hechos”.
El equipo legal de Shakira ha solicitado la inadmisión de la demanda, alegando que el procedimiento se ha iniciado de forma incorrecta y que no existe relación alguna entre la artista y el denunciante. La defensa ha confirmado que Shakira está “sorprendida y preocupada” por el alcance del caso, cuya primera audiencia está prevista para este jueves en la Corte de Miami.
Este episodio pone de relieve la vulnerabilidad de personas mayores ante fraudes digitales y la facilidad con la que se puede suplantar la identidad de figuras públicas en plataformas sociales. Por el momento, no se ha determinado si Shakira deberá comparecer personalmente o si lo hará por videoconferencia, aunque su equipo confía en que el caso será archivado sin mayores consecuencias.