Palacio de Ferias y Congresos de Málaga se convirtió en epicentro mundial de la cultura pop con la celebración de la primera edición europea de la San Diego Comic-Con, y lo hizo con un invitado estelar: Arnold Schwarzenegger, leyenda del cine de acción, exgobernador de California y figura transversal que sigue despertando pasiones a ambos lados del Atlántico.
El actor fue homenajeado como artista destacado de esta edición, en una ceremonia que reunió a miles de asistentes en el Hall M, donde recibió el galardón de manos de Antonio Banderas, quien lo presentó como “un símbolo de superación, disciplina y carisma que ha marcado generaciones”. A su lado, el cineasta Álex de la Iglesia celebró su legado con humor y admiración: “Arnold no solo es Terminator, es un género en sí mismo”.
Schwarzenegger, visiblemente emocionado, agradeció el reconocimiento con palabras en inglés y español: “Gracias por este recibimiento. España siempre ha sido parte de mi historia. Aquí rodé Conan el Bárbaro, aquí aprendí a amar el cine europeo”. El público respondió con una ovación cerrada, entre gritos de “¡Sayonara, baby!” y pancartas con frases icónicas de su filmografía.
Durante su intervención, ofreció una masterclass sobre ‘Desafío Total’, donde repasó anécdotas del rodaje, habló de su colaboración con Paul Verhoeven y reflexionó sobre el papel de la ciencia ficción como espejo social. “La tecnología puede ser peligrosa si no se usa con ética. En el cine lo mostramos como advertencia, no como profecía”, afirmó, en referencia a la inteligencia artificial y los dilemas actuales.
Uno de los momentos más inesperados fue cuando lanzó una propuesta directa a Álex de la Iglesia: “¿Por qué no hacemos una película juntos? Tú tienes el talento, yo tengo el músculo”. El director, entre risas, respondió: “Si tú eres el músculo, yo pongo el caos. Ya tenemos título”. El público estalló en aplausos ante la posibilidad de ver a Schwarzenegger en una producción española.
La Comic-Con de Málaga, que reunió a más de 120.000 asistentes en cuatro días, incluyó más de 300 horas de contenido, paneles de series como The Walking Dead, Talamasca y The Boys, y la presencia de figuras internacionales como Jared Leto, Gwendoline Christie, Luke Evans, Dafne Keen y Rosario Dawson. El evento se consolidó como una cita imprescindible en el calendario cultural europeo.
Schwarzenegger también se refirió a su relación con Sylvester Stallone, con quien compartió décadas de rivalidad cinematográfica: “Antes competíamos por quién tenía más músculos, ahora competimos por quién tiene más nietos”, bromeó. Y añadió: “La verdadera fuerza está en la capacidad de reinventarse. Stallone lo ha hecho, yo también. Eso es lo que nos mantiene vivos”.
En su discurso de cierre, el actor lanzó un mensaje de unidad que resonó en todo el recinto: “No miréis al otro como enemigo. No hay enemigos, sólo personas con historias distintas. El cine nos une, nos hace imaginar juntos”. Y como no podía faltar, se despidió con su frase más célebre: “Volveré”, provocando una ovación que se extendió varios minutos.
La presencia de Schwarzenegger en Málaga no solo fue un homenaje a su carrera, sino también una celebración del cine como espacio de encuentro, memoria y futuro. Su carisma, cercanía y sentido del humor conquistaron a fans de todas las edades, confirmando que, más allá de los personajes, Arnold sigue siendo un icono cultural con vigencia global.
