Después de meses marcados por la tensión mediática y el distanciamiento, Carmen Borrego y su hijo José María Almoguera han reaparecido juntos en público durante el desfile de la colección de Félix Ramiro en le Semana de la Moda de Madrid (MBFWM). Carmen acudió a apoyar a su hijo, del que dijo sentirse «orgullosa», que ha desfilado para la firma. Madre e hijo han mostrado una actitud cercana y cómplice que confirma la reconciliación familiar, compartiendo una jornada relajada, con gestos de cariño y conversación fluida.
La relación entre ambos se había visto afectada por la exposición mediática de la familia, especialmente tras la participación de Paola Olmedo, esposa de José María, en el programa ¡De viernes!, donde se abordaron temas personales que incomodaron a Carmen Borrego. Desde entonces, los encuentros entre madre e hijo habían sido escasos y discretos.
Sin embargo, esta nueva aparición pública —en un entorno familiar y sin cámaras de televisión— ha sido interpretada como una señal clara de reencuentro emocional. Carmen, que recientemente se ha alejado de los focos tras su salida de Así es la vida, ha manifestado en varias ocasiones su deseo de recuperar la relación con su hijo y mantener la unidad familiar.
Un gesto que emociona al entorno mediático
La buena sintonía entre ambos ha sido celebrada por compañeros del mundo televisivo, como Terelu Campos, hermana de Carmen, y por seguidores que han seguido de cerca la evolución de esta historia familiar. En redes sociales, muchos han destacado la importancia de priorizar los vínculos personales por encima de los conflictos públicos.
Carmen Borrego también ha hablado con la prensa sobre el enfrentamiento entre su hermana Terelu y Rocío Flores en un programa de televisión la semana pasada: «Ese tema lo tenemos muy superado. El que sabe la verdad lo supera rápido». Además, ha añadido: «Cuando no puedes hablar tienes que estar comedida», refiriéndose a la actitud de Terelu durante el programa. También ha querido comentar que su relación con Rocío Carrasco «sigue siendo buena»: «El problema es que últimamente casi no nos vemos porque no coincidimos, nada más».
