El Ayuntamiento de Madrid ha ordenado el cierre temporal de El Retiro y otros ocho parques históricos de la ciudad debido a las condiciones meteorológicas adversas previstas por la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET). La medida, que entró en vigor el pasado miércoles a las 15:00 horas, responde a la alerta por rachas de viento de hasta 56 km/h y temperaturas que podrían alcanzar los 35 grados.

Los parques afectados por el cierre son: El Capricho, la Rosaleda del Parque del Oeste, Juan Carlos I, Juan Pablo II, la Quinta de Fuente del Berro, la Quinta de los Molinos, la Quinta de Torre Arias y el Parque Lineal del Manzanares. Todos ellos permanecerán clausurados hasta que los técnicos del área de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad evalúen los posibles daños en el arbolado y confirmen que no existe riesgo para los visitantes.
Este protocolo de seguridad, activado en situaciones de alerta meteorológica, busca prevenir accidentes derivados de la caída de ramas o árboles, especialmente en zonas con ejemplares de gran porte. Según datos del consistorio, El Retiro apenas permanece cerrado el 1% del tiempo, pero en ese reducido margen se han registrado el 80% de las caídas de ramas, lo que refuerza la eficacia de la medida.
Agosto es tradicionalmente uno de los meses más críticos en cuanto a desprendimientos de ramas, debido no solo al viento y la lluvia, sino también al impacto del calor extremo. En 2024, se contabilizaron 66 caídas en El Retiro durante ese mes, lo que ha llevado a reforzar los protocolos de vigilancia y cierre preventivo.
Desde el Ayuntamiento se ha informado que la reapertura de los parques se comunicará a través de sus canales oficiales, incluidos los 22 paneles informativos situados en los accesos de El Retiro. Mientras tanto, se recomienda a los ciudadanos evitar las zonas verdes afectadas y extremar las precauciones ante la ola de calor.
La oposición ha solicitado en varias ocasiones una revisión del protocolo, aunque el delegado del área, Borja Carabante, ha defendido su aplicación, señalando que El Retiro tiene una singularidad especial, ya que el 68% de sus árboles son maduros y, por tanto, más vulnerables a las condiciones extremas.
Esta actuación se enmarca dentro del Plan de Seguridad del Arbolado que el Ayuntamiento aplica desde hace años, y que contempla cierres parciales o totales en función del nivel de alerta emitido por la AEMET. La prioridad, según fuentes municipales, es garantizar la seguridad de los ciudadanos sin renunciar al uso responsable de los espacios verdes.