Fin de semana en Cádiz: Rocío Flores y Gloria Camila disfrutan entre polémicas familiares

Rocío Flores y Gloria Camila han compartido un animado fin de semana en Cádiz, en medio de la creciente tensión por la custodia de María del Rocío, hija de Michu y José Fernando. Las dos jóvenes, muy unidas desde hace años, se dejaron ver en distintos puntos de la provincia andaluza, disfrutando de momentos de […]

Rocío Flores y Gloria Camila han compartido un animado fin de semana en Cádiz, en medio de la creciente tensión por la custodia de María del Rocío, hija de Michu y José Fernando. Las dos jóvenes, muy unidas desde hace años, se dejaron ver en distintos puntos de la provincia andaluza, disfrutando de momentos de ocio y desconexión.

Gloria Camila y Rocío Flores en Cádiz. © GTRES

Este viaje se produce poco después del fallecimiento de Michu, madre de la menor, lo que ha desatado una batalla legal y mediática entre la familia paterna —representada por Gloria Camila y Ortega Cano— y la familia materna, encabezada por Tamara, hermana de Michu. Aunque en días anteriores Rocío Flores y Gloria Camila se habían reunido con la niña en Arcos de la Frontera, durante este fin de semana no hubo rastro de la pequeña, lo que ha generado especulaciones sobre su paradero y el tiempo que realmente pasa con sus familiares paternos.

Mientras tanto, tía y sobrina han aprovechado su estancia en Cádiz para impulsar su nuevo proyecto empresarial: una foodtruck de hamburguesas instalada en el festival Puro Latino, en El Puerto de Santa María. Con nombres de artistas urbanos y precios accesibles, el negocio ha sido bien recibido por el público, y ambas se han mostrado entusiastas con esta nueva aventura.

La ausencia de la hija de Michu durante este fin de semana ha sido notoria, especialmente tras las declaraciones de Gloria Camila en televisión, donde aseguró que su prioridad es el bienestar de la menor. Sin embargo, las críticas de la familia materna continúan, acusando a los Ortega de querer apropiarse de la custodia sin haber estado presentes en la vida de la niña en los últimos años.

Este episodio añade un nuevo capítulo a la compleja historia familiar que rodea a los descendientes de Rocío Jurado, marcada por enfrentamientos públicos, decisiones judiciales y una constante exposición mediática.