Radiante, sonriente y visiblemente emocionada. Así reapareció Francesca Thyssen-Bornemisza en el Museo Nacional Thyssen-Bornemisza durante la inauguración de la exposición Terrafilia. Más allá de lo humano, una muestra que reflexiona sobre la conexión afectiva con la Tierra y que reúne obras de las colecciones Thyssen-Bornemisza, Carmen Thyssen y TBA21. Pero más allá del arte, todas las miradas se dirigieron a un detalle muy especial: su anillo de compromiso.
La hija del recordado barón Thyssen y de la modelo Fiona Campbell-Walter posó por primera vez con su prometido, el alemán Markus Reymann, con quien se casará el próximo octubre de 2025. Aunque ambos evitaron posar juntos en el photocall, sí se dejaron ver sentados uno junto al otro durante el acto, compartiendo miradas cómplices y discretas sonrisas.
Un anillo con historia y diseño contemporáneo
Francesca no dudó en mostrar su anillo ante los fotógrafos: una pieza de banda ancha, con un diseño geométrico y floral, cubierto de diamantes blancos de talla brillante. El detalle más llamativo son los “hilos de oro” que unen las piedras centrales de cada rosetón, creando el efecto de un diamante único. Un diseño moderno, simbólico y absolutamente deslumbrante.
Una historia de amor entre arte y océanos
La pareja anunció su compromiso el pasado mayo mediante un comunicado en el que pedían privacidad para su enlace y agradecían las muestras de cariño recibidas. Se conocieron hace más de una década gracias a su pasión compartida por el arte y el océano, y juntos fundaron en 2011 la TBA21-Academy, una plataforma que une creatividad, ciencia y activismo medioambiental.
Para Francesca, de 67 años, será su segundo matrimonio tras su unión con el archiduque Carlos de Habsburgo-Lorena, con quien tuvo tres hijos. Markus Reymann, 18 años menor, es artista, exnadador, actor ocasional y actual director de Ocean Space en Venecia.
La inauguración de Terrafilia fue, sin duda, el escenario perfecto para que Francesca compartiera con el mundo su felicidad personal, sin eclipsar el mensaje artístico y ecológico de la exposición. Una aparición elegante, simbólica y profundamente emotiva.
