De Bustamante a Carla Pereyra: los famosos se vuelcan con Pequeño Deseo en su 25 aniversario

Entre los asistentes más destacados brilló Carla Pereyra, siempre vinculada a causas sociales, quien no solo deslumbró con su presencia sino que también compartió un momento muy personal: la reciente llegada del primer nieto de su pareja, Diego Pablo Simeone. “Estamos en un momento familiar increíble. Este niño nos trae mucha paz”, confesó emocionada, mientras celebraba la labor de la Fundación con la que colabora desde hace años.

El cantante David Bustamante fue otro de los grandes protagonistas de la velada. Conocido por su cercanía y calidez, el artista recibió un reconocimiento especial por su apoyo constante a la entidad, tanto en eventos como en acciones de visibilidad. Su presencia fue ovacionada por los asistentes, que valoraron su implicación más allá del escenario.

La gala, conducida por la periodista Marta Robles, incluyó una subasta benéfica con obras de arte, experiencias exclusivas y objetos donados por celebridades. También se rindió homenaje a voluntarios, profesionales sanitarios, empresas colaboradoras y familias que han acompañado a la Fundación desde sus inicios.

El actor Antonio Resines, siempre cercano a las causas solidarias, acudió a la gala con su característico estilo sobrio y elegante. Vestido con traje oscuro y camisa blanca sin corbata, se mostró especialmente emocionado durante el homenaje a los voluntarios, destacando la importancia de “dar sin esperar nada a cambio”.

El torero José Antonio Canales Rivera se mostró especialmente cercano y comprometido con la causa infantil, afirmando: “Soy padre y empatizo mucho con los niños”, en referencia al trabajo de la entidad con menores que atraviesan enfermedades graves. En un tono distendido, también compartió impresiones sobre la actualidad taurina y familiar, comentando la retirada de Morante de la Puebla como “una sorpresa”, aunque reconoció que “el descanso del guerrero es fundamental”. Sobre la ruptura de Kiko Rivera e Irene Rosales, confesó que no lo sospechaba, y ante los rumores sobre una nueva relación de Irene con Guillermo, zanjó con naturalidad: “Vida no hay más que una”. Su presencia aportó espontaneidad y cercanía a una noche marcada por la solidaridad.

La presentadora y empresaria Patricia Pérez apostó por un estilismo sofisticado en tonos azules y malvas, con vestido fluido y accesorios dorados. Reconocida por su compromiso con causas sociales y su trayectoria en medios de comunicación, Patricia se sumó a una velada que reunió a colaboradores, artistas y representantes institucionales en torno a una causa común: cumplir los sueños de niños con enfermedades graves. Su participación aportó visibilidad y calidez a una noche marcada por la empatía y el agradecimiento.

El empresario Pedro Trapote y su esposa, Begoña García Vaquero, acudieron como pareja anfitriona de honor, reforzando su vínculo con la Fundación desde hace años. Él, con traje azul marino y corbata burdeos; ella, con un conjunto blanco y rosa y bolso marrón, proyectaron elegancia y discreción. Su apoyo institucional fue clave en la organización de la gala y en la articulación de nuevas alianzas.

Mónica Hoyos compartió reflexiones personales y sociales que marcaron su intervención con autenticidad y compromiso. La comunicadora destacó la necesidad de reforzar la conciencia educativa frente al acoso escolar: “No hay una educación fuerte para el bullying”, afirmó con firmeza. En un tono más íntimo, reveló que su hija planea dedicarse a la política, y expresó con humor su deseo de cerrar pronto su etapa de soltería. Sobre su vínculo con Carlos Lozano, fue clara y conciliadora: “La relación está muy bien, somos familia”. Su presencia aportó cercanía, espontaneidad y sensibilidad a una noche dedicada a cumplir sueños.

La productora Macarena Rey, directora general de Shine Iberia, también asistió a la gala del 25º aniversario de la Fundación Pequeño Deseo, celebrada en Madrid. Su presencia en el evento reforzó el vínculo entre el mundo audiovisual y las causas solidarias, en una noche dedicada a visibilizar el poder transformador de los sueños cumplidos. Con un estilismo sobrio y elegante, Rey se sumó a una velada en la que se reconoció el compromiso de colaboradores, artistas y entidades que han acompañado a la Fundación a lo largo de su trayectoria. Su participación subrayó el respaldo del sector cultural a iniciativas que combinan empatía, creatividad y acción social.

La Fundación Pequeño Deseo ha convertido hospitales, estadios y parques temáticos en escenarios de ilusión, gracias a alianzas con instituciones como el Valencia CF, la Fundación Real Madrid, Parques Reunidos o la Fundación Atlético de Madrid. En esta gala, también se reconoció a empresas como Nintendo, Ryanair, CaixaBank y Fundación Occident, que han contribuido a hacer realidad miles de deseos a lo largo de este cuarto de siglo.

Con una ambientación cálida, música en vivo y un espíritu profundamente humano, la celebración fue mucho más que un aniversario: fue una declaración de intenciones para seguir construyendo esperanza. Porque como recordó uno de los niños homenajeados: “Un deseo cumplido no cura, pero te hace más fuerte”.