Julia Bolaños y José María Ramírez-Cárdenas y Cabello de los Cobos, una boda de altura en Carmona

La pareja, que ha mantenido una relación discreta durante más de dos años, selló su compromiso en una ceremonia religiosa celebrada en la Iglesia de Santa María, seguida de una recepción en la finca familiar de los Bolaños, a las afueras de Sevilla.

La Iglesia de Santa María de Carmona, situada en el corazón del casco histórico de esta localidad sevillana, es uno de los templos más emblemáticos de la provincia. Construida sobre una antigua mezquita almohade, su estructura actual combina elementos góticos, mudéjares y renacentistas, fruto de sucesivas ampliaciones desde el siglo XV. Destaca por su imponente portada plateresca, su retablo mayor barroco y su elegante torre campanario, que domina el perfil urbano de Carmona. En su interior, alberga valiosas obras de arte sacro y capillas laterales dedicadas a distintas advocaciones, convirtiéndola en un escenario habitual para celebraciones religiosas de alto perfil, como bodas y actos institucionales.

La novia, formada en gemología y con trayectoria en firmas de alta joyería como Suárez y Roberto Coin, apostó por un diseño exclusivo de Jorge Vázquez: un vestido de crepé de seda blanco, con bordados florales en degradé, escote barco, manga francesa y fajín de gasa crudo que ceñía la cintura.

Completó el conjunto con una cola larga, velo bordado en encaje beige sujeto a un moño bajo, pendientes de diamantes y un ramo en cascada de nardos blancos, en una propuesta que equilibraba clasicismo y sofisticación.

La novia, que llegó a la iglesia acompañada por su padre, Luis Bolaños, hizo su entrada por la nave central de la Iglesia de Santa María de Carmona bajo una atmósfera solemne y cargada de emoción. El gesto de llegar del brazo de su padre, figura destacada en el sector agroalimentario andaluz, reforzó el carácter familiar y simbólico del enlace. Ambos fueron recibidos por los acordes de un cuarteto de cuerda y la mirada atenta de los invitados que aguardaban en el interior del templo. La escena, marcada por la elegancia y la tradición, dio inicio a una ceremonia que combinó sobriedad litúrgica y calidez social.

El novio, por su parte, lució el tradicional chaqué y corbata, y llegó al templo acompañado del brazo de su madre y madrina, María Antonia Cabello de los Cobos.

La madrina destacó con un vestido verde y bordados inspirados en el mantón de Manila, combinado con mantilla negra, en uno de los estilismos más comentados del día.

Entre los invitados, sobresalieron figuras del mundo de la moda, la política y la empresa. La modelo Nieves Álvarez acudió acompañada de su prometido, el empresario libanés Bill Saad, con un vestido midi en tono rosa, escote con volantes y zapatos de Manolo Blahnik, que acapararon todas las miradas.

El empresario libanés Bill Saad, novio de Nieves Álvarez, con traje azul y corbata a juego.

Por su parte, Manuela Villena, esposa del presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla, asistió sin su marido y deslumbró con un diseño a medida de Nicolás Montenegro en rojo, escote palabra de honor, pendientes de Suma Cruz, chal en rosa y rojo de Again Cashmere y sandalias doradas.

El evento reunió a más de 300 invitados en una jornada marcada por la elegancia, la emoción y la discreción. Tras la ceremonia, los asistentes se trasladaron a la finca familiar, donde tuvo lugar el banquete y la celebración posterior, ambientada con música en directo, gastronomía andaluza y una decoración floral inspirada en los jardines de la campiña sevillana.

La pareja, que ha cultivado su relación lejos de los focos, ha sido reconocida por su complicidad y discreción. Julia, que decidió alejarse del negocio familiar para seguir su vocación creativa, y José María, actualmente vinculado a Huawei España como director de Asuntos Públicos, Comunicación y Sostenibilidad, han iniciado una nueva etapa rodeados de afecto y admiración por parte de su entorno.

La boda ha sido considerada uno de los eventos sociales más destacados del otoño, no solo por el perfil de los contrayentes, sino por la presencia de invitados de alto nivel y la cuidada estética del enlace. La elección de Carmona, con su patrimonio histórico y su entorno natural, ha reforzado el carácter íntimo y elegante de la celebración.