El hijo de Carmen Borrego, José María Almoguera, ha vuelto a ser el centro de atención mediática por la entrevista que concederá en televisión el próximo viernes para responder públicamente a lo que su madre dijo hace una semana en ‘¡De viernes!’ y a las declaraciones de Paola Olmedo.
El joven ha reaparecido ante las cámaras este domingo en un evento de motos en el circuito del Jarama, una prueba de conducción organizada por @eventosceni.
Almoguera intentó esquivar todo lo que pudo las preguntas relacionadas con su familia y en qué punto se encuentra su relación con ellos. El joven remitía constantemente a su próxima entrevista en televisión: «El viernes lo veréis todo, se va a ver la verdad, no hay más, hay muchas cosas que no son ciertas y se van a ver las cosas como son».
Con los medios rodeándole, José María confesó sentirse cada vez más cómodo delante de las cámaras, superado el vértigo inicial: «Cada vez me siento cómodo delante de una cámara. Al principio es verdad que había más vértigo pero llega a sentirse a gusto y bien».
También quiso comentar cómo va su relación con Alejandra Rubio, tras haberle llamado esta inmaduro. Sin embargo, José María aseguraba que no le gustaría tener mala relación con nadie y que le cae «todo el mundo bien»: «Me gustaría no tener mala relación con nadie, pero cada uno que opina lo que quiera, que son libres de hacerlo».
José María Almoguera también cuestionó por qué su madre y su tía deberían tener miedo de lo que pueda decir públicamente, asegurando que tiene pruebas de todo. Además, desmintió no haber visitado a su abuela cuando estaba enferma, prometiendo contar toda la verdad el viernes. «Voy con la verdad por delante».
En cuanto a su relación con Paola Olmedo, José María afirmó que no hay ni malos ni buenos, y que cada uno actúa según sus creencias. Aseguró que su corazón está tranquilo y cerrado al amor tras su divorcio, y que su relación con Paola se limita a ser los padres de su hijo.