
Rafael Nadal fue ayer el invitado estrella en el programa “El Hormiguero”, marcando el inicio de la nueva temporada del popular show de televisión. La presencia del tenista mallorquín generó gran expectación y no decepcionó a los espectadores, quienes disfrutaron de una entrevista llena de momentos emotivos y revelaciones interesantes.
Durante su conversación con el presentador Pablo Motos, Nadal habló sobre su reciente ausencia en el US Open, explicando que aún no se siente al 100% físicamente tras los problemas que ha enfrentado en los últimos tiempos. Su objetivo principal es llegar en perfectas condiciones a los Juegos Olímpicos de París, y a partir de ahí, decidir su futuro en el tenis profesional.

Uno de los momentos más destacados de la entrevista fue cuando Nadal compartió su experiencia como portador de la antorcha olímpica en la inauguración de los Juegos de París. El tenista confesó que estuvo a punto de soltar alguna lágrima debido a la emoción del momento, describiéndolo como una experiencia espectacular.
El tenista también habló sobre cómo la paternidad ha cambiado su vida. «A nivel deportivo me ha cambiado drásticamente. Yo se lo digo siempre a mi hijo, que ya empieza hacer alguna cosa: ‘Papá, una patata’, porque desde que ha llegado este mundo no he ganado casi ningún partido. En eso sí que me ha cambiado para mal, deportivamente hablando. Pero en la vida, en la mayoría de las cosas, me ha cambiado para bien, porque al final he perdido, he estado lesionado, pero pase lo que pase, volver a casa y verle me cambia el humor».
Además, Nadal habló sobre la irrupción de Carlos Alcaraz en el mundo del tenis, asegurando que no cree que las comparaciones con él vayan a afectar negativamente al joven deportista. “Va a ser uno de los mejores de la historia”, afirmó Nadal, mostrando su admiración por el talento y la dedicación de Alcaraz.

El programa también tuvo momentos de diversión y cercanía, con Nadal interactuando con las famosas hormigas Trancas y Barrancas, y respondiendo a preguntas personales y curiosas. Uno de los gestos más aplaudidos de la noche fue cuando Nadal se acercó a saludar a una chica con discapacidad que se encontraba entre el público, demostrando una vez más su humildad y calidez humana.
La visita de Rafael Nadal a “El Hormiguero” no solo marcó un inicio espectacular para la nueva temporada del programa, sino que también permitió a los fans del tenista conocer más sobre su vida y sus planes futuros. Sin duda, una noche memorable tanto para los espectadores como para el propio Nadal.