
Un escándalo con repercusiones laborales
Anabel Pantoja enfrenta un complicado momento profesional tras la investigación judicial en la que está involucrada junto a David Rodríguez. La presunta implicación en un caso de malos tratos a su hija Alma ha generado consecuencias inmediatas en su imagen pública.

Reducción de su presencia en redes
Desde que se conoció la noticia, la influencer ha optado por un perfil más bajo. Sus publicaciones en redes sociales se han reducido y ha evitado apariciones mediáticas, posiblemente en un intento de minimizar la controversia.

Marcas y proyectos en retirada
La revista Pronto informa que varias marcas con las que colaboraba han decidido desvincularse de ella. La incertidumbre sobre su situación legal y el debate público en torno a su figura han hecho que algunos contratos sean cancelados.

El impacto de la polémica en su imagen
Santiago Mollinedo, experto en redes y marca personal, señala que las empresas suelen evitar asociarse con personas envueltas en controversias. En un entorno donde la reputación es clave, cualquier escándalo puede traducirse en pérdidas económicas.

Publicaciones que generan críticas
Pese a la situación delicada, Anabel ha compartido imágenes de su reciente vida social, incluyendo fotos en una terraza con cervezas, en un concierto y en celebraciones nocturnas. Estas publicaciones no han pasado desapercibidas.

Comentarios divididos en rede
Las imágenes han desatado una ola de críticas. Algunos usuarios consideran que no es el momento adecuado para compartir este tipo de contenido, acusándola de falta de sensibilidad ante la investigación en curso.

Mensajes de desaprobación
Comentarios como «No tiene dos dedos de frente» o «Es torpe, debería saber cómo funciona esto» han inundado las redes. Muchos creen que, aunque sus actividades no sean escandalosas, la situación exige mayor prudencia.

Defensores de su derecho a la normalidad
A pesar de la polémica, algunos seguidores han salido en su defensa. Argumentan que Anabel tiene derecho a hacer su vida y que las críticas son exageradas. «¿Acaso la niña estaba en la fiesta?», cuestionan.

Un debate que no cesa
El caso ha generado una polarización en la opinión pública. Mientras algunos insisten en la irresponsabilidad de la influencer, otros consideran que está siendo juzgada de manera desproporcionada.